lunes, 22 de junio de 2009

Las Polillas del Madero


Como dirían los Pata Negra: “ Esta es la historia de un buen charro mejicano y de un pistolero ofrecido del amor, que a las muchachas mas bonitas que encontraba, que no dejaba por el campo ni una flor”…

Como recordaran la legión de seguidores de este blog (en realidad son cuatro y a dos de ellos les estoy haciendo chantaje), en nuestra primera entrega decíamos que la leyenda de Loren tenia su origen en cierto día en que a un “madero” se le ocurrió la nefasta idea de cuestionar su superioridad y en la segunda entrega definíamos la esencia y gracia de una buena barbacoa o carne a la brasa al estilo Loren; pues bien hoy vamos a tratar de explicar los pecados que cometió el mencionado “madero”, porque su caída fue tan rápida y dolorosa y el porqué del verdadero origen de la leyenda… Y es que, queridos amigos, el primer error que cometió nuestro “madero” fue llegar a un ambiente-medio hostil y querer ejercer de macho dominante de la manada, (asin en plan: aquí estoy yo porque he venido), el segundo fue guiarse por los cantos de sirena, (siempre malos consejeros), el tercero fue fiar toda su suerte al manual, que esta para seguirlo en sus conceptos, pero no para pensar que es infalible y el cuarto, mortal de necesidad, fue no tener la suficiente buena visión de juego para ver por donde iba la jugada ni para darse cuenta de que, como saben los buenos estrategas y los buenos jugadores de ajedrez, una retirada a tiempo puede llegar a convertirse en una victoria; pero vayamos por partes, no nos apresuremos porque desvirtuamos la historia.

El “madero”, en realidad, es un tipo simpático, alto, moreno, con una pequeña cicatriz y porte atlético, amable, de buen talante y, a simple vista, una persona a la que se le puede presuponer cierta calidad, pero que le falla su exceso de soberbia, arrogancia y, sobretodo, le faltó no atender a los sabios consejos que la insuperable Vanesa, (otro de los personajes importantes en esta historia y una gran maestra en la táctica de los noventa minutos), no dejaba de darle y consignarle, para que pudiera lograr el punto óptimo en lo que ya hemos explicado que es una buena barbacoa al estilo Loren y eso que los materiales que se pusieron a su alcance y disposición eran de inmejorable calidad, a saber: la barbacoa original del estilo Loren, la autentica, la manufacturada de principio a fin por Don Diego, la carne de la mejor calidad que se recuerda por estos lares y la sangría, néctar de los dioses, fabricada con todo el cariño y mimo posibles, por la no menos insuperable también, Miriam, siempre en discreto segundo plano, (dicen que detrás de un gran hombre siempre hay una gran mujer, y este es el caso Loren), siempre realizando una labor importantísima y de vital importancia para el devenir de esta historia y siempre bien secundada en sus labores por las, también, siempre poco recordadas y reconocidas Lourdes, Maria y Casandra, de las que ya tendremos tiempo de hablares a todos ustedes en las siguientes entregas de esta historia, ya verán, ya.

El caso es que aquí es donde nos encontramos con nuestro “madero”, a saber, día primaveral en pleno otoño, ambiente festivo y cordial, buenos amigos, buena comida y buena, mucha y variada, bebida y nuestro protagonista de hoy con las ideas claras y el objetivo plenamente definido, primer error; porque era tan claro y tan plausible el objetivo que perseguía, la presa a la que quería hincarle el diente, la causa y el efecto de su presencia allí, que rápidamente el personal se puso a la expectativa y a lanzar dardos envenenados, a su favor y en su contra, práctica muy habitual por estas tierras del sur de Europa donde manejamos como nadie el doble y el triple sentido de las palabras, pero el tipo aguanto bien esta clase de vicisitudes, como que van de oficio; todo hay que decirlo, el “madero”, en sus planteamientos, era claro y definido, iba a lo que iba y en este caso, en lo tocante a las directrices del manual y la correcta aplicación de las mismas, no hay ningún pero que ponerle, el tío siguió el manual al pie de la letra e incluso desarrollo con gran maestría y estilo la táctica Kawasaki, siguió las pautas establecidas con gran diligencia, concentración e inteligencia: aproximación, acoso y derribo, auque con una gran falta de adecuación al medio en el que se encontraba, segundo error; porque con lo que no contaba el “madero” era precisamente con la raíz de este blog, con que La sombra de Loren es alagarda, y sobretodo, con que la victima de sus ataques, (bien aleccionada y entrenada en este tipo de batallas por nuestro maestro Loren), si que estaba perfectamente adaptada al medio en el que se encontraba y si que conocía las tácticas de evasión y defensa mas depuradas y perfeccionadas del lugar, y claro, el final ya se lo pueden ir imaginando, el “madero”, que hasta ese momento iba bien, intento entrar por donde tenia que entrar, hacer un ataque clásico por la banda izquierda, ( al estilo Paco Gento: se interna, centra y gol ), y se encontró, como era de esperar, con la famosa táctica de evasión conocida como “la cobra venenosa”, tan extendida y tan bien estudiada por la mayoría de las mujeres de este nuestro país y que es todo un orgullo para su raza, tercer error.

Pero aquí no acaba la cosa, nuestro “madero”, es un tipo aguerrido, perseverante, que no se acobarda por cualquier cosa y que no se deja amilanar ni desfallece a las primeras de cambio, no, nuestro “madero” es un tipo con orgullo, con gran amor propio y seguro de si mismo y, lejos de darse por vencido, ( una derrota en una batalla no significa que se vaya a perder la guerra ), siguió con su táctica del acoso y derribo, intentando, esta vez si, llevar a su victima a un entorno mas adecuado para su objetivo, noble en su planteamiento pero mortal de necesidad, muchos fueron sus errores y este era uno mas que sumar en su contra, muchas fueron las veces que se le advirtió de lo poco recomendable que era enfrentarse a la grandeza de Loren y el hecho de no aceptar su derrota y de seguir cuestionando tan enorme verdad fue su final definitivo y en conclusión el mismo fue el que precipito su caída al abismo, cual cordero que va al matadero, y el mismo fue el primero que entendió y sufrió en sus propias carnes porque la sombra de Loren es alargada….

5 comentarios:

  1. Sigo sin entenderlo....

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  2. UUUFFFF.....ni en Donde Está Corazón..más conocido coo DEC cuentan culebrones de esta índole!!

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  3. NO ME HE ENTERADO DE NADA, TÍO!!

    LOL

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